En homenaje a la pintora Frida Kahlo recientemente tuvo inicio una exposición de ropa y objetos pertenecientes a la Casa Azul, residencia en donde vivió la artista con su reconocido esposo Diego Rivera, durante años, transformándose actualmente en el Museo Frida Kahlo.
En esta ocasión los objetos personales salieron del closet para formar parte de un evento repleto de diseños característicos de la cultura mexicana y de su personalidad.
Los protagonistas sin dudas resultaron ser los infaltables vestidos de flores, encajes y algodón, creados por Ricardo Tisci, las blusas cortas con coloridos estampados y faldas largas, junto a los zapatos y las valiosas joyas que completaron perfectamente cada look. Los corsés artísticos, de todos los materiales y estilos, y aquél especialmente diseñado por Jean Paul Gaultier para la firma japonesa Comme des Garçons, lograron honrar a la artista en su memoria.
El título de este evento, “Las apariencias engañan”, se relaciona con el hecho de que Kahlo logró disfrazar su cuerpo dañado, por una enfermedad y un accidente, con el delicado bordado de sus blusas cortas y el complejo peinado de trenzas, acaparando la atención y la mirada de las personas sobre su rostro y no sobre sus partes afectadas.
Imagen: diariopopular.com.ar